Hola! Amigos/as y curiosos lectores de este breve
relato del concierto. Dicen que cantar es un fabuloso cóctel. Bálsamo
quitapenas, que oxigena el cerebro, fortalece los pulmones, da ritmo al
corazón. Un auténtico elixir de juventud. Así que, como uno de los componentes
de la coral Stella Maris de Priegue, os invito a unos sorbetes de tan mágica poción.
Ante todo, valorar el duro y agotador trabajo de
varios días de ensayos y preparativos, montajes y desmontajes,
que un evento tan espectacular exige. Felicitar a los invitados: Solistas, Javier
Mejuto e Iker Freire, a la pareja de baile J. Manuel y Ana Freire.
Y cómo no, al jinete Alejandro y su caballo Zagal, en la canción
de Juan Pardo. A Javier , tocando, relatando, cantando… A Loly, dirigiendo a todos. Técnicos de sonido, músicos y a todo el coro en general. Que como dice la
canción: “ Hay que darle tiempo al
tiempo y aprenderse la lección” En este caso, varias lecciones y cada cual debe
aprenderse la suya.
Na víspora do concerto, o deus Eolo, escomenzou a soprar e abateo sobre nos, un fresco vento de noroeste, que facía voar os papeis da directora Loly , azoutándonos as costas, e arrincando dos beizos as lindas cancions , diluíndoas sin ton ni son. Os instrumentos musicais soaban a lata chinesa. Os morcegos fuxían escorrentados dos canizos e alboios. O técnico en son Manuel e axudantes, mordían as uñas de impotenza. As Torres de Compostela aguantaban, mais as Lágrimas negras, tornábanse brancas. Nothing else matters (Ya nada importa) Perdón...
Al día siguiente...
Los dioses del Olimpo se apiadaron de nosotros, Babo Pietá... Enviando a su caballo Pegaso, que con sus alas nos protegía del viento, bramando: ¡ Fuxan os ventos ¡ que Meu amor e mariñeiro.
Los dioses del Olimpo se apiadaron de nosotros, Babo Pietá... Enviando a su caballo Pegaso, que con sus alas nos protegía del viento, bramando: ¡ Fuxan os ventos ¡ que Meu amor e mariñeiro.
Se desata Waterloo, la pareja de
baile se luce y en Caballo de batalla, Pegaso se convierte
en Zagal, marcando el paso majestuoso… Músicos, coro
y solistas hacían el resto, ganándose los aplausos del público, que se rendía
ante el espectáculo de luz, sonido, efectos especiales, pirotecnia. Y
sobre todo por el gran trabajo, imaginación y buen hacer. Mi
piace, e bello, bello…
Jesús.l.. 29 de Agosto del 2015
Jesús.l.. 29 de Agosto del 2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario